La verdadera historia sobre la madre de Elon Musk está inspirando al mundo entero

Como el rostro de Tesla y SpaceX y como uno de los empresarios más ricos de la historia, Elon Musk se ha convertido en una de las figuras más reconocibles del mundo. Sin embargo, no llegó a la cima por su cuenta. Maye Musk no solo fue una madre devota para Elon, sino que también lo inspiró al superar inmensas dificultades personales y asumir riesgos increíbles. Recientemente, Maye salió de la sombra de su hijo y pasó a primer plano. 

Un vínculo fuerte

Aunque la verdad es que los dos han compartido protagonismo en algunas ocasiones notables, como cuando él la subió al escenario durante su muy visto episodio de Saturday Night Live. Durante su monólogo, el magnate de la tecnología mostró su lado vulnerable, le dijo a su madre que la amaba y compartió con la audiencia que tiene el síndrome de Asperger. Quedó claro que los dos son increíblemente cercanos, y este momento apenas araña la superficie.

Se mudó al extranjero

Nunca se vio a sí misma como la madre de un genio. Nacida en Canadá en 1948, Maye Haldeman se mudó con sus padres a Pretoria, Sudáfrica, cuando solo tenía dos años. Junto con su padre quiropráctico, su madre profesora de baile y cuatro hermanos, Maye disfrutó de una infancia llena de aventuras, con salidas al desierto de Kalahari y viajes por el mundo en una avioneta. Para Maye, el mundo era suyo.

"Vive peligrosamente… con cuidado"

“Mirando hacia atrás, me doy cuenta de que era peligroso cruzar el desierto con una brújula y un suministro de agua y comida para tres semanas con cinco niños”, admitió Maye. Sin embargo, sus padres eran cautelosos a la hora de planificar sus excursiones familiares. Según Maye, el lema de su familia era "Vive peligrosamente… con cuidado". Esta expresión ayudó a la niña a salir de su caparazón.

Encontrando su lugar

Como un medio para financiar su interés en estudiar ciencias, un amigo convenció a Maye de que intentara modelar. Esto proporcionó un flujo de ingresos constante para Maye, quien a la edad de 21 años participó en el concurso de belleza Miss Sudáfrica. Después de trabajar algunos años como modelo de medios impresos y de pasarela, su novio de la escuela secundaria la enfrentó con una pregunta que le cambió la vida.